Bien, aún no he podido escuchar el concierto completo, pero mi amigo El Conde si fue testigo del evento y nos da su opinión.
Sin cobertura en Santiago.
¿Será simplemente que, como admirador que soy de la música de Jean Michel Jarre, tenía la equivocada impresión de que el de anoche iba a ser uno de los conciertos más importantes del año en España? ¿Será quizá porque -manejando cifras que lo demuestran- los conciertos del francés han sido los más multitudinarios y espectaculares de la historia de la música popular? Pues no sé muy bien los motivos, pero desde luego tengo claro que ningún medio de comunicación nacional del que yo tenga noticia ha hecho ni la más mínima mención al evento de anoche en Santiago de Compostela.
Jarre pudo tocar directamente desde el rellano frente al Pórtico de la Gloria de la catedral, cosa que al parecer casi nunca se había hecho antes (suelen montar escenarios delante para no estropear el monumento), iluminando toda la fachada del templo espectacularmente, utilizando todos los edificios alrededor de la plaza como pantallas donde proyectar imágenes alusivas a los temas que se movían a su ritmo. El aforo máximo se completó, y encima hubo que llevarse a muchísima gente a la plaza de A Quintana para que por lo menos viesen el concierto en una pantalla grande. Los de A Quintana lo disfrutaron algo menos, en diferido por problemas técnicos de conexión vía satélite, y chapuceramente a causa de la emisión ratera de la TVG -que hizo incluso cortes publicitarios, jajajaja-. Pero lo del Obradoiro, tal como señalan la agencia EFE y los medios gallegos, fue colosal. Perfecto en todos los sentidos posibles. Pero ni yo ni casi nadie lo vimos, unos porque no se enteraron, otros porque no tuvimos forma de verlo -imagino que en alguna parte de Internet se emitió online-, así que no puedo ofreceros la crítica que os prometí hace unas semanas. Sí que quiero incidir en lo que dije al principio.
Pueden leer el artículo completo en: otrasmusicasotrosmundos.blogspot.com
Agradezco a El Conde por la información.